Hoy vamos a hablar del último entrenamiento que tuvimos en el grupo de jóvenes. Estábamos trabajando sobre la comunicación no violenta y como existen técnicas que de una u otra forma pueden ayudarnos a expresar las que queremos sin herir los sentimientos. Una de las participantes me indujo a escribir esto mismo para los padres y madres. Alla va.
Uno de los retos más comunes para los padres de adolescentes es encontrar el equilibrio adecuado entre la autonomía que buscan sus hijos y la necesidad de mantener una comunicación cercana y abierta. Este equilibrio es especialmente importante cuando los jóvenes quieren expresar su deseo de tener más espacio personal, como se refleja en la frase que una adolescente, en un entrenamiento grupal, planteó como posibilidad de uso con su abuela con la que vivía después de la muerte de sus padres:
«Abuela, quiero mucho a la familia, pero necesito tiempo para mí misma y mis amigos. Quizás podamos hablar más adelante.»
Este tipo de situaciones es un excelente ejemplo de cómo la técnica del sándwich puede ayudar a los adolescentes a expresar sus necesidades de manera asertiva y respetuosa. Como padres, podemos enseñarles esta técnica para que aprendan a decir lo que piensan sin miedo a lastimar a los demás y, al mismo tiempo, respetando sus propios límites.
¿Qué es la Técnica del Sándwich?
La técnica del sándwich consiste en dar retroalimentación o expresar sentimientos de una forma balanceada, empezando y terminando con un comentario positivo, y colocando en el medio una necesidad o crítica constructiva. De esta manera, se crea un ambiente de comunicación más receptivo y menos defensivo.
En el contexto de un adolescente que desea más tiempo para sí mismo, esta técnica puede ser una herramienta poderosa para que sus necesidades sean escuchadas sin generar conflicto o malentendidos.
Aplicación práctica de la Técnica del Sándwich
Analicemos la frase de ejemplo para ver cómo se estructura siguiendo la técnica del sándwich:
- Primera capa (positiva): «Abuela, quiero mucho a la familia.»
- El adolescente inicia su mensaje mostrando aprecio y valor por la relación familiar. Esto es fundamental para que la otra persona (en este caso, la abuela) se sienta reconocida y valorada, lo que facilita la recepción de la parte siguiente.
- Parte central (necesidad personal): «Pero necesito tiempo para mí misma y mis amigos.»
- Aquí el adolescente expresa claramente su necesidad de espacio personal, un aspecto muy común en esta etapa de la vida, donde los amigos cobran una importancia significativa. Usar la palabra «pero» introduce suavemente la idea de que hay un aspecto que necesita ser diferente, sin dejar de lado el aprecio inicial.
- Última capa (positiva): «Quizás podamos hablar más adelante.»
- Terminar con una propuesta abierta como esta, deja la puerta entreabierta para un futuro contacto. Esto asegura que la abuela no se sienta rechazada, sino que entienda que el adolescente solo está buscando un espacio en este momento específico.
¿Por qué es Importante para los Padres?
Al enseñar a nuestros hijos adolescentes a usar la técnica del sándwich, les ayudamos a desarrollar habilidades de comunicación clave, como la asertividad y la empatía. Estas habilidades son esenciales para que puedan expresar sus límites de manera saludable y al mismo tiempo, ser conscientes del impacto de sus palabras en los demás.
La adolescencia es un período de búsqueda de identidad y autonomía, y los jóvenes necesitan sentirse escuchados y comprendidos. Al usar esta técnica, pueden aprender a comunicar sus necesidades de una forma que no genere tensiones innecesarias, favoreciendo un ambiente de respeto y comprensión mutua.
Consejos para los Padres:
- Modela la Técnica del Sándwich en Casa: Utiliza la técnica en tu día a día cuando tengas que dar retroalimentación a tus hijos o incluso en situaciones con otros adultos. Esto les dará un ejemplo práctico y cercano de cómo aplicarla.
- Valida Sus Sentimientos: Cuando un adolescente te hable usando esta técnica, enfócate en validar tanto la parte positiva como su necesidad de espacio. Por ejemplo, podrías decir: «Entiendo que necesites tiempo para ti y para tus amigos, y me alegra que valores tanto a la familia.»
- Practica Juntos: Si notas que a tu hijo le cuesta expresar lo que siente, invítalo a practicar contigo. Puedes proponerle situaciones hipotéticas y guiarlo para que estructure su mensaje usando esta técnica.
Conclusión
La técnica del sándwich es una herramienta que facilita la comunicación asertiva entre padres e hijos adolescentes, ayudando a los jóvenes a expresar sus deseos y necesidades sin perder de vista el respeto por los demás. Enseñar esta técnica a nuestros hijos no solo mejora la dinámica familiar, sino que también les proporciona una habilidad valiosa para su vida adulta.
Recuerda que, como padres, nuestro objetivo es guiar a nuestros hijos en el desarrollo de su autonomía, mientras les brindamos un entorno seguro donde puedan aprender a ser honestos consigo mismos y con los demás. La técnica del sándwich es solo un ejemplo de cómo podemos lograrlo, y al aplicarla, estamos sembrando las bases para relaciones más fuertes y saludables.
¿Tienes alguna experiencia usando esta técnica con tus hijos? ¡Déjanos tus comentarios y comparte cómo te ha funcionado!