Aplicando la Fórmula de la Humanidad en la crianza
La Fórmula de la Humanidad de Kant nos invita a tratar a nuestros hijos como fines en sí mismos, respetando su dignidad y autonomía. En lugar de imponer castigos impulsivos, debemos reflexionar, comunicarnos con empatía y modelar el comportamiento que esperamos. Esta perspectiva fomenta una crianza coherente, ética y respetuosa, donde el vínculo familiar se fortalece desde el respeto mutuo.