Los intercambios comunicacionales pueden ser tanto simétricos como complementarios
Dependiendo de si la relación de las personas comunicantes está basada en intercambios igualitarios, es decir, tienden a igualar su conducta recíproca (p. ej.: el grupo A critica fuertemente al grupo B, el grupo B critica fuertemente al grupo A); o si está basada en intercambios aditivos, es decir, donde uno y otro se complementan, produciendo un acoplamiento recíproco de la relación (p. ej.: A se comporta de manera dominante, B se atiene a este comportamiento).
Una relación complementaria es la que presenta un tipo de autoridad (padre-hijo, profesor-alumno) y la simétrica es la que se presenta en seres de iguales condiciones (hermanos, amigos, amantes, etc.)
Ejemplos
Para la simétrica podemos tener de ejemplo el refrán que dice: «dos que duermen en el mismo colchón se vuelven de la misma condición».
Para complementaria podemos utilizar cualquier anuncio del mundo sanitario donde siempre aparece el título de la profesional o del profesional para indicarnos que habla desde un plano superior por su título.