Muchas veces nos introducimos en una confrontación de la que no podemos salir. Se crea un bucle en el que se produce una escalada en el conflicto, al mismo tiempo que parece que los discursos de cada uno van en paralelo.
Esto ha ocurrido hoy en una sesión, mientras yo intentaba hacer una lectura de la situación para intentar desbloquearla, la adolescente seguía en su visión de la situación, así que se me ocurrió leerle este proverbio árabe:
No digas todo lo que sabes,
no hagas todo lo que puedes,
no creas todo lo que oyes,
no gastes todo lo que tienes,
porque…
el que dice todo lo que sabe,
el que hace todo lo que puede,
el que cree todo lo que oye,
el que gasta todo lo que tiene,
muchas veces….
dice lo que no conviene,
hace lo que no debe,
juzga lo que no ve
y gasta lo que no puede
Respuesta: «Es lo que te decía yo«, ojiplático me he quedado.
Pero hemos podido reconducir el tema…